Perros, proyecto en desarrollo coproducido por Bolivia, Chile, México y Francia, ganó hace pocos días la Cinéfondation del Festival de Cannes, la residencia para el impulso de películas de jóvenes creadores que otorga el mercado de cine más prestigioso del mundo. La película es dirigida por el chileno Vinko Tomicic y producida por el boliviano Álvaro Manzano. En plena etapa de financiación y de cara al rodaje en la primera mitad del 2020, Manzano comparte la historia del proyecto y sus perspectivas.
Sinopsis: Martín, un lustrabotas de 14 años de la ciudad de La Paz, empieza a sospechar que uno de sus mejores clientes es su padre: el Sr. Novoa, un solitario sastre que tiene como único lazo afectivo a su perro, un fino pastor alemán. Martín, movido por esta sospecha, idea un plan para robar el perro y de esta forma confrontar al hombre, que él cree, lo ha rechazado todos estos años.
Dirección y guion: Vinko Tomicic
Producción: Álvaro Manzano
Género: Drama
Productora: COLOR_MONSTER
Socios productores: Calamar Cine SpA (Chile), Jirafa (Chile), Zafiro Cinema (México).
Imagen Docs: El proyecto tiene un importante recorrido por talleres y laboratorios de desarrollo desde 2015. ¿Cómo se fue enriqueciendo en todo este proceso y periodo de tiempo?
Álvaro Manzano: El recorrido por talleres y laboratorios ha sido muy bueno e importante para lograr acuerdos. Por ejemplo, el proyecto estuvo en Ave Puentes, un taller específicamente de coproducción entre países de Latinoamérica y Europa. Ha servido para trabajar el guion, pero sobre todo para trabajar una estrategia de coproducción y para armar un esquema de producción más adecuado para el proyecto. Hemos participado también en Viennale College, que es súper interesante porque es un taller intensivo en el que trabajan juntos director y productor y sirve para afinar el guion desde el punto de vista de la producción. Hemos trabajado, por ejemplo, en torno a aquellas escenas que no eran necesarias, con el fin de optimizar recursos, pero desde el guion. Ahora, el proyecto ganó en Cinéfondation, que es la residencia de escritura del Festival de Cannes. Acá obviamente lo que más se trabaja es el guion pero también la visión de dirección, todo lo que tiene que ver con la propuesta estética y visual del director. Es una residencia enfocada en el autor.
Pienso que es muy importante la etapa de desarrollo de un proyecto. En Bolivia yo creo que es lo que más hace falta trabajar, este enfoque en el desarrollo. Hay muchas películas que, por ir demasiado rápido, tienen fallas de guion pero también del modelo de producción. Estas fallas hacen incluso que, a la larga, las películas no se puedan vender afuera, no tengan un recorrido de festivales, no aprovechen todo el potencial que tenían. Es importante prestarle más atención al desarrollo porque pienso que es la etapa más importante. Es una etapa que, además de ser la más barata en el proceso de hacer una película, es clave para definir muchas cosas. Se puede sacar más provecho para proyecto en esta fase, se optimizan los recursos, se pule la propuesta estética, etc.
ID: Desde tu experiencia como productor, ¿cómo se trabajan proyectos de coproducción para levantar una película?
AM: Esta es mi segunda experiencia en coproducción internacional. La primera que tuve fue en la coproducción entre Bolivia y Argentina para la película Chaco, de Diego Mondaca [aún no estrenada]. Perros es una coproducción entre Bolivia, Chile, México y ahora se suma Francia. Creo que antes en Bolivia, cuando no teníamos fondos (todavía no tenemos, pero se sabe que van a abrirse pronto), la coproducción era un buen camino para hacer posible las películas. Hay otros modelos de producción también, se hacen películas con presupuestos más reducidos, con modelos más pequeños, pero la coproducción internacional era un buen camino sobre todo por la ventana que abre Ibermedia para ese tipo de esquemas. Creo que más allá de eso –que va a cambiar, porque hay un fondo del Programa Intervenciones Urbanas (PIU), hay otro del municipio de La Paz, va a haber un fondo del ADECINE– van a abrirse otros caminos para financiar películas. Además, la coproducción es un camino interesante porque no solamente se trata de la financiación de película, sino de abrir mercados para la película, de hacer distribución internacional, entrar a festivales y también hacer colaboración técnica y artística. Cuando la coproducción es real y se hace bien puede ayudar mucho a hacer crecer el proyecto en muchos niveles, hacer crecer el guion, la propuesta, por ejemplo a través de la participación de profesionales para la producción.
ID: ¿Qué características consideras como las más llamativas del proyecto?
AM: Creo que el fuerte de este proyecto es el guion. Es un guion que no solo quedó seleccionado en muchas instancias muy prestigiosas de desarrollo de proyectos, sino que cuando nos ha tocado recibir el asesoramiento de consultores de guion, este ha sido el aspecto que más ha sorprendido de todo el proyecto. El premio en CinéFondation de Cannes tiene que ver con la calidad del guion, la historia y cómo está contada.
ID: ¿La historia de Martín está basada en una historia real?
AM: Es una historia totalmente ficcionada. De hecho, es una historia que Vinko, el director, quería trabajar hace mucho. Encontró en el contexto paceño y en la vida de los lustrabotas el marco perfecto para contarla. La historia se ha enriquecido con la realidad, no solo de los lustrabotas sino de La Paz, de todo el mundo de las laderas. La construcción de los personajes es fruto de nuestro trabajo durante más de tres años con niños lustrabotas a través de distintas fundaciones, como Nuevo Día, Hormigón Armado o Vamos Juntos. Hemos trabajado en talleres y otras actividades con estas fundaciones y esto ha aportado muchos elementos, anécdotas, historias de los niños lustrabotas, detalles como la música que escuchan, cómo se visten, etc., muchos aspectos que enriquecen al universo narrativo de Perros.
ID: ¿Cómo fueron los talleres y el proceso de casting en el que participaron 170 niños lustrabotas de La Paz?
AM: Es un trabajo de varios años. Cuando nos dimos cuenta que queríamos trabajar con niños lustrabotas de La Paz vimos que el proyecto no podía hacerse de la noche a la mañana. Hace más de tres años hicimos el primer acercamiento. A través de la organización Hormigón armado, el director Vinko empezó a dar talleres de cine a los chicos. Ellos hicieron un documental y varios cortometrajes. Luego participamos en otras actividades con otras fundaciones, Nuevo Día y Vamos Juntos. Una vez empezamos a trabajar con ellos, identificamos al grupo que nos interesaba de niños y jóvenes, y seguimos con otros talleres, direccionados a la actuación. Como parte de estos talleres filmamos hace un año y medio un cortometraje, Aycha, que se estrenó este año 2019 en el Festival de Guadalajara. Fue una experimentación del modo de trabajar con los niños lustrabotas y también una exploración visual, del estilo de dirección de actores, una prueba para el director sobre cómo trabajar con los chicos en una ficción. Era interesante saber, por ejemplo, cómo ellos iban a reaccionar a escenas con diálogos. Luego de esto, con estos chicos hicimos cuatro castings a lo largo de varios meses, y también hicimos un par de castings abiertos, en los colegios y en la Cinemateca, para hacer una preselección del grupo con el que nos gustaría trabajar en la película. Ahora, el grupo seleccionado está tomando clases introductorias de actuación, con la actriz Erika Andia en la casa taller Casa Mágica. Después, vez terminada la residencia en Cinéfondation de Cannes, con el director se va a empezar un trabajo más específico e intensivo con los niños.
ID: ¿Cómo se desarrollará la dirección de actuación de la película?
AM: El trabajo de dirección de actores es el resultado de estos años de trabajo con los niños. Pero también vamos a tener el apoyo, a través de la coproducción que hicimos con México, de un especialista en trabajo con no actores. Nuestros coproductores mexicanos son los productores de La jaula de oro (Diego Quemada Díez, 2013), la película mexicana que ganó la competencia Un certain regard en Cannes y que tuvo muchísimo éxito en festivales. La persona que trabajó entrenando al elenco en esta producción va a trabajar en Perros también. Vamos a desarrollar un entrenamiento actoral, no tradicional porque claramente el trabajo con los lustrabotas es diferenciado. Creo que la mezcla entre los chicos lustrabotas y los actores profesionales va a ser interesante para ambas partes. Para los actores profesionales va a ser un buen proceso porque los chicos lustrabotas les van a dar más frescura y naturalidad, y, a la vez, los chicos van a poder apoyarse en los actores profesionales para determinadas situaciones.
ID: Finalizada la producción y postproducción viene todo el proceso de distribución y exhibición ¿esta película está pensada para un público local o internacional?
AM: El diseño que hemos hecho para la producción apunta a que Perros es un film pensado para festivales, en primera instancia, respondiendo sobre todo al recorrido que ha tenido el proyecto en instancias de desarrollo y el hecho de que como proyecto ya es conocido por varios programadores en festivales. Está en el mapa de varios festivales, pero uno nunca sabe, hay que llegar a ese momento. Sin embargo, la idea inicial es esa, distribuir primero en festivales, y luego distribuirla comercialmente en los países coproductores, Chile, Bolivia, México, lugares donde ya tenemos pre acuerdos de distribución. Por otra parte, nos interesa mucho vender la película en territorio europeo, lograr distribución en Francia y otros países, como Alemania, Holanda o Bélgica, etc.
Actualmente estamos en la etapa de financiación. Tenemos cerrado el guion, locaciones, casting, y ahora en este momento de financiación estamos optimistas porque tenemos un proyecto sólido y fuerte. Hemos postulado a Ibermedia y a otros fondos en los países coproductores. También estamos viendo exactamente cómo van a ser las bases de los fondos en Bolivia y si estos tiempos coinciden con nuestra planificación. Nuestra intención es idealmente conseguir todo el financiamiento que necesitamos. Si no, tenemos pensado un esquema más pequeño, porque creemos que, después de todo el recorrido del proyecto en su desarrollo, es importante filmarlo ya. Si filmamos ahora, Perros tiene grandes posibilidades de conseguir distribuidor fuera, por ejemplo. Ahora estamos optimistas y felices, agradecidos con toda la gente que se ha sumado al proyecto y por los grandes logros que ha tenido. El premio en el Festival de Cannes ha sido el mejor regalo a todos los años de trabajo, sin remuneración, poniéndole esfuerzo y sacrificio al proyecto. A veces uno trabaja y piensa que es en vano y se desanima. Este es un proceso que ya tiene varios años y ahora se está comenzando a ver los frutos.
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