Ernesto Flores: cómo no hacerse lío con la marihuana, los desnudos y la ley de cine.

Ernesto Flores estrenó su primera película en el Festival de Cine Radical 2018. Cómo matar a tu presidente se hizo en dos semanas y con amigos. Sergio Zapata conversó el 26 de febrero de 2019 con el joven director en el programa radial de Imagen Docs, La mirada incendiaria. Como matar a tu presidente se estrenó comercialmente en marzo de 2019. Antes, la película estuvo en el festival Transcinema de Lima, Perú, y en el Festival Cinema de Fronteira de Río Branco (Brasil), donde obtuvo una mención especial del jurado.

Imagen Docs: ¿Qué planes tienes para este 2019?

Ernesto Flores: Estoy trabajando un poco para poder ahorrar y comprarme una cámara y así hacer otra película.

ID: Como matar a tu presidente la hicieron con equipo prestado…

EF: Nos prestamos equipo de la escuela de cine, también de un amigo y de otro amigo, y así.

ID: Hablemos sobre cómo se hizo la película. Se hizo en dos semanas aproximadamente…

EF: Sí, una semana de rodaje y otra semana de edición. La semana de rodaje tuvo lluvias y la edición ocupaba todo el día. Vivíamos juntos, días sin parar. Luego ya, dormir tranquilos.

ID: ¿Por qué el título, Cómo matar a tu presidente?

EF: Porque era atractivo, además yo iba escribiendo y luego vi que esto se hacía como un mix. Es un nombre atractivo que podría llamar a la gente para que vean la película.

ID: La película se desarrolla un día antes de las elecciones de un futuro no muy lejano…

EF: Justo en 2019 es la película, este año. Es sobre el futuro, habla sobre un día antes, durante y el día después de las elecciones y bueno, es la historia de un chico que quería ir a votar y vemos lo que hace, y él no hace nada…. Pero si vemos lo que hace, lo que piensa, por eso está todo filmado en primera persona. La otra historia, que es un día después, es como una charla normal, pero en realidad es un complot contra el presidente.

ID: Y así conocemos a Bicho…

EF: Justo mi personaje, sí, a veces aparezco en un reflejo pero no salgo completo, no me ven completo pero sí soy el personaje y mis amigos son los demás personajes, Grisy Jopo y Chencho. Solo ella tenía un papel, hizo teatro, mientras que los demás no. También Richard actúa y hace sonido. Rotamos los roles.

ID: ¿Y cuál fue el proceso de la película? por ejemplo, la decisión de hacer las preguntas.

EF: Las primeras dos preguntas ya las tenía pensadas, quería hacerlas, como para poder ponerlas en Youtube, qué pasaría si mataran al presidente y qué harías si se abriera McDonalds, si irías a comer ahí. Esas preguntas ya las tenía de antes. Y la tercera vino cuando estaba escribiendo un guion, me mandaron información de este muchacho venezolano asesinado y empecé a investigar un poco más y se me ocurrió preguntar.

ID: ¿Y qué opinas de los comentarios sobre tu película, que dicen que es la más importante del 2018?

EF: La verdad no he leído y no quiero leer, no sé si suena pretencioso pero quiero ver la reacción de la gente. No tanto leer critica, que hagan crítica y que a la gente de afuera le guste, pero como está hecha aquí y además está basada en este año quiero ver qué le parece a la gente.  

ID: ¿Y para futuro, en qué otro lugar vas a mostrar la película?

EF: Sé que Cochabamba y Oruro la están pidiendo, en unos festivales, y aquí en La Paz en la Cinemateca… hay temas legales que no entiendo, como tener una productora con un año de existencia para poder pasar tu película, cosas que no entiendo que sabe bien la productora, y nosotros no tenemos empresa productora, es una película pequeña, muy artesanal. Quiero llevarla a El Alto.

ID: Se habla mucho de que hacer cine es difícil, ¿qué piensas sobre esto?

EF: Sí, se dice eso. Nosotros hicimos esta película con dos mil bolivianos y equipo prestado. Además, no había un guion como tal, sino trozos de historias, hasta que conseguimos el dinero. Ahí debimos mezclar todo y ahora sí hacerlo de una vez. Nunca pensé en esas cosas. Más bien me pregunto porque no hacen películas aquí, porque conseguir cuatro mil o cinco mil bolivianos no es tan difícil, especialmente personas que tienen 30 o 28 años y que ya han estado haciendo cortos. No sé, la verdad, por qué no se animaran.

ID: Es un desafío interesante a los realizadores locales…. Tal vez es miedo o algo así.

EF: Quizás sí. No sé… por ejemplo, cuando yo escribo pienso en el dinero, en las posibilidades, en lo que puedo hacer con lo que tengo. Con esta película fue así, tenía cositas escritas y ya con el dinero que gestionó la productora fue fácil escribir. Yo creo que las personas están pensando en hacer cosas muy grandes, pensando en cuanto dinero quieren tener o necesitan. Por eso deberían hacer cosas más personales, ver su ambiente, por ejemplo, una casa ya es una locación, al lado hay una plaza, ahí tienes otra locación. Cosas así.

ID: Parece un consejo simple…

EF: Sí, pero no sé, los más experimentados quizás crean que no es así, por a los changos de 19 o 20 años, les digo que lo intenten, no pierden nada. El equipo de nuestra película está compuesto por changos, un amigo de 30 años nos ayudó un día, de ahí todos tenemos entre 19 y 22 años.

ID: Lo interesante de estos fenómenos es que con ley o sin ley de cine, el cine existe y resiste.

EF: Sí, de eso hablamos, ¿no? En el Festival Radical se estrenaron el año pasado seis largos, sin ley del cine. Yo nunca pensé en lo de la ley. Hay que hacer nomas. Hay gente experimentada que habla de cómo hacer, pero creo que no hay fórmulas, sí hay reglas. Nosotros descubrimos nuestra manera de hacer haciendo. Para este proyecto, mis amigos, que no actúan, fue un privilegio el trabajar con personas que no son actores ni actrices, pero que se animan a actuar. Que no se hacen lio con la marihuana ni los desnudos. Es raro, algo que me fijo en el cine boliviano, no hay violencia ni desnudos, menos drogas, no sé por qué, pero es algo que se debería mostrar.

ID: Y a futuro, ¿qué planes?

EF: Algo así como docuficción, algo sobre documental y ficción. Pero ahora ojalá la gente pueda ver mi película Cómo matar a tu presidente.