Las imágenes, las pantallas y El Anti-Faz | #Radical2019

Fotos, teléfonos y cuentas de Facebook, las imágenes sujetas a una interfaz digital dominante. Enrique Méndez toma esa interfaz como marco en un montaje muy claro en su concepto a la vez que explora un tipo de sujeto moderno, una personalidad y el conflicto que conlleva. En este largometraje, Jair (el protagonista) tarda bastante en convertirse en un personaje, su conflicto se desenvuelve lentamente hasta el punto de quiebre, hasta entonces el papel de Jair funciona como un usuario, una cuenta, un correo electrónico y una contraseña, un operador de máquinas con conexión a internet.

Todo lo que sabemos de Jair va de acuerdo a su interacción en Facebook y su teléfono, desde ahí él construye su tipo, ahí maneja todo lo referente a su personalidad. Vemos cómo construye en su pantalla ese producto artificial. Esa pantalla como una vía unidireccional de mensajes a ningún lado, a nadie. El fin es la adaptación, el reconocimiento, alcanzar los estándares de éxito millenial.

Pero además, en El Anti-Faz (2019) Méndez interpela a las imágenes a través de una interpelación a los hacedores de imágenes. ¿Cómo el molde del fabricador de imágenes condiciona al mismo espectro de imágenes?

Y, ¿qué son las imágenes hoy en día, finalmente?, ¿aplicaciones de valores técnicos y estéticos, condiciones sociales?

Aquí están las imágenes y las personas según los mismos márgenes sociales, a través de los filtros de las redes sociales y el enfoque público ¿Qué posteamos en Facebook?¿Qué escogemos mostrar de lo mucho que somos? ¿Se trata de esconder lo que nos avergüenza y exponer lo que nos enorgullece, acaso? Todo parte de códigos, de maneras de hacer, hasta de elementos técnicos. Las grabaciones de celular en contraste a la cámara DSRL, el fotógrafo de modelos contra el músico punk. La estética y el estatus a costa de lo auténtico, de lo sencillo. La técnica y los valores para aprender a hacer imágenes y llevarlas puestas encima. Hacerse de imágenes, así adaptarse a un mundo de imágenes dominantes y hegemónicas.

Película de la sección Radicalismos Peruanos, del Festival de Cine Radical 2019.